02/04/2018

Intervención de Nekane Alzelai y Nazario de Oleaga

“Aitziber Zapirain nos recordaba en su presentación lo que es el motor que nos une a las 17 entidades y 14 personas a título individual que conformamos el espacio Foro Social Permanente.

La construcción de una convivencia sobre bases sólidas, debe hacerse sobre dos pilares:

El primero, reconocimiento, justicia y reparación para todas las víctimas que han sufrido diferentes expresiones de violencia.

El segundo, resolución de las consecuencias del conflicto: el desarme de ETA y la cuestión de las personas presas y huidas.

Precisamente es sobre este último tema – «Facilitar el retorno de las personas presas o huidas por motivaciones políticas»- sobre el que vamos a trabajar en este IV. Foro Social por la Paz en el País Vasco.

Y no es casualidad que lo tratemos en nuestra agenda, después de haber trabajado durante un año en la problemática del desarme y la destrucción de las armas de ETA.

Hoy estamos mucho más cerca de que este proceso de desarme se finalice en un plazo razonable, de manera ordenada y con verificación internacional. Y lo estamos porque, entre todas y todos (las tres instituciones vascas, la comunidad internacional y la propia sociedad civil), hemos sabido construir el marco de acuerdos y consenso necesarios para que este proceso se dé sobre bases lo suficientemente sólidas.

Es precisamente sobre esta misma triangulación que queremos construir, a partir de hoy, unas conclusiones que permitan dar pasos, en un futuro próximo, hacia una hoja de ruta transversal y consensuada. En este caso, junto a las tres instituciones y a la sociedad civil, el tercer vértice deseamos que lo ocupen los propios colectivos de personas presas y exiliadas.

Para el Foro Social Permanente, siguen siendo plenamente de actualidad las cuatro recomendaciones de marzo 2013 en relación a esta cuestión:

La nº 4.- Recomendamos un consenso sobre una solución integral a la cuestión de las personas presas y huidas. Se trata de un elemento esencial para construir una convivencia estable y duradera. Para ello, consideramos que es necesario adecuar la legalidad a la realidad y aplicar una justicia de carácter transicional, ayudando a la sociedad a consolidar la convivencia. Al mismo tiempo, como punto de partida, deben modificarse aspectos de la política penitenciaria que contravienen los derechos humanos o que van contra el tratamiento humanitario de las personas presas, eliminando medidas excepcionales contrarias a los estándares internacionales. En particular, la situación de las que se encuentran gravemente enfermas, la negativa a conceder la libertad a aquellas que han cumplido su condena y terminando con la dispersión, que penaliza a sus familias.

La 5.- Recomendamos que el proceso de reintegración se realice por medio de cauces legales, aceptando que el mismo, siendo integral, se debe desarrollar de forma individualizada, escalonada, y en tiempo prudencial. Este proceso requiere, por parte de los presos, mostrar su compromiso con el nuevo escenario de paz y renunciar a vías violentas. Además, en su caso, debe haber por su parte un reconocimiento del daño causado como consecuencia de su actuación.

La 6.- Recomendamos que los presos sean actores activos en el desarrollo del proceso de paz y normalización. Por ello, es importante facilitar la relación y el intercambio de opiniones entre las personas presas, la ciudadanía vasca e instituciones competentes, con el objetivo de promover una convivencia para el futuro en el que ningún tipo de violencia tenga lugar.

Y la 7.- Recomendamos estudiar la situación de las personas huidas explorando vías para su integración en la sociedad, dando una solución a las mismas.

Como preparación de este Foro, durante los dos últimos meses hemos desarrollado una metodología participativa. Hemos mantenido encuentros con todos los sindicatos de la Comunidad Autónoma Vasca, con numerosos juristas y profesores de derecho de las diversas universidades, con las entidades Sare, Etxerat, Bagoaz y las iniciativas Kalera Kalera e Ireki. Además, hemos solicitado sus aportaciones a los colectivos de huidos y presos.

Además de estas, hoy también profundizaremos en las aportaciones que se han producido en este terreno desde que, en junio 2014, se celebró el II. Foro Social en Bilbao y Pamplona específicamente sobre esta misma problemática.

Concretamente:

  • En el Plan del Gobierno Vasco para la reinserción de los presos políticos: el programa Hitzeman de septiembre de 2014 y la propuesta Zuzen Bidean de noviembre de 2014.
  • En las aportaciones de los colectivos de huidos y presos, estas últimas precisamente en respuesta a las cuatro recomendaciones anteriormente enunciadas desde el Foro Social
  • En la resolución del Tribunal Europeo de Derechos Humanos de octubre 2013, sobre la conocida como “Doctrina Parot” y la decisión del Tribunal Supremo español de enero 2015, ratificada por el Tribunal Constitucional en octubre, de no aceptar la acumulación de las penas cumplidas en los países de la Unión Europea.
  • En la Declaración de Baiona del 24 de octubre de 2014, en la que electos representativos de todas las corrientes políticas diseñan una hoja de ruta con miras al Estado francés.
  • En los programas de gobierno en Pamplona y Vitoria-Gasteiz y, más recientemente, en el documento para el debate hecho público el pasado 26 de diciembre por la dirección del EPPK.

Caminamos hacia un nuevo escenario, en el que una de las cuestiones pendientes (la del desarme de ETA) quedará definitivamente resuelta. Esta situación debe posibilitar crear nuevas oportunidades para que este aspecto que hoy vamos a trabajar se pueda encaminar desde parámetros razonables.

Y este nuevo escenario debe servir en dos sentidos:

  • Primero, para lograr un consenso lo más amplio posible en el marco de nuestro país. Por nuestra parte constatamos que, pese a la actitud del Estado español y el Estado francés, en Euskal Herria estamos empezando a ver que se está creando una nueva oportunidad para definir una hoja de ruta transversal e inclusiva, basada en las recomendaciones antes citadas. Tomando como premisa un acuerdo amplio, entendemos que hay fuerza y voluntad para superar la situación actual.
  • Pero también para los propios gobiernos español y francés. Este nuevo escenario hará todavía más incompresible la aplicación de sus políticas penitenciarías actuales. Es el momento para ellos de evolucionar en sus posiciones y adecuarse al momento de esperanza que está viviendo nuestro pueblo. Desde el Foro Social Permanente así se lo demandamos.

Para finalizar, queremos subrayar que hoy venimos aquí con un folio en blanco. Un folio que queremos escribir entre todas y todos para que su resultado refleje realmente la voluntad mayoritaria de esta sociedad.”