17/05/2021

“Compromiso Social para construir una convivencia democrática”: primera devolución

Las entidades que conforman el Foro Social han comparecido en el Palacio Miramar para valorar el proceso de debate “Compromiso Social para construir una convivencia democrática”.

PRIMERA PARTE (ENEKO CALLE)

Presentación del proceso en el IX aniversario de Aiete, el 17 de octubre. 

Hoy cumplimos nuestro compromiso de realizar hoy, aquí, una primera devolución de este proceso participativo con motivo mañana del día internacional de la convivencia en paz.

Un proceso ambicioso que contenía tres bases para el debate:

  • Lograr una cultura democrática plena de respeto de todos los derechos civiles, políticos y sociales de todas las personas.

  • Trasmitir a las nuevas generaciones una cultura del diálogo y de no violencia como instrumento único en el siglo XXI para resolver los conflictos.

  • Reflexionar sobre la convivencia democrática, entendiendo esta de una forma integral, con un objetivo al que aspiran también diferentes sectores de la sociedad. 

Para ello el proceso debía proponer mecanismos que activaran a la sociedad civil, generando dinámicas participativas, para alimentar el “Compromiso social por la construcción de la convivencia democrática”. Y para ello, desde el Foro Social, durante estos seis meses hemos puesto en marcha las siguientes iniciativas: 

  • Ronda de reuniones con las entidades que forman parte del Foro Social Permanente. 

  • Encuentros con entidades y agentes sociales que no forman parte del Foro Social Permanente. Algunas entidades han participado enviando sus reflexiones y aportaciones por escrito; otras organizando espacios de debate y reflexión colectiva, de manera privada o pública; y algunas han participado en coloquios o diálogos públicos sobre la convivencia democrática. 

  • Hemos creado un buzón abierto en la página web del Foro Social para que cualquier ciudadano o ciudadana pueda hacer su aportación, enriqueciendo así el documento. 

  • Hemos impulsado la redacción de aportaciones de diferentes personas referentes de la sociedad vasca. Gracias al compromiso de los cuatro principales grupos comunicativos (Gara, Berria, Grupo Noticias y Grupo Vocento), algunas de esas aportaciones se han publicado en formato de artículos en medios de comunicación y el resto están disponibles en la página web del Foro. 

  • Y hemos organizado un ciclo de cuatro coloquios durante el mes de marzo, “Bizikidetza lantzen. Tejiendo compromiso”, unos espacios de diálogo y reflexión sobre la convivencia democrática incorporando debates y propuestas de diferentes sectores de la sociedad civil (ámbitos del periodismo, eclesial, cultural y social), participando en total 12 ponentes. 

El proceso ha sido más lento de lo deseado. Lo entendemos, ya que hoy vivimos un contexto de múltiples crisis, en el que las prioridades de la mayoría de agentes sociales son más de ámbito social, económico o sanitario. 

Pero, aun así, creemos que los objetivos que nos propusimos hace seis meses se han conseguido y podemos extraer algunas conclusiones y certezas de las aportaciones y reflexiones que hemos recogido a través de las diferentes iniciativas que hemos impulsado. 

Y a continuación, Aitzpea Leizaola y Mikel Casado os harán una devolución de las mismas. 

SEGUNDA PARTE (MIKEL CASADO Y AITZPEA LEIZAOLA

El pasado 17 de octubre iniciamos en el Palacio de Aiete un proceso ambicioso para la elaboración de un “Compromiso social para la construcción de la convivencia democrática”. 

Hoy, aquí, cumplimos nuestro compromiso de realizar una primera devolución de este proceso participativo aprovechando que mañana es el Día Internacional de la Convivencia en Paz.

Somos conscientes de que la construcción de la convivencia, y más aún de una convivencia democrática, es un proceso sin fin, que, aunque consista en unos principios insoslayables, debe alimentarse y nutrirse permanentemente desde los diferentes sectores de la sociedad, y que está condicionada, pero también sugerida, a por la experiencia, por los contextos políticos, sociales, económicos y culturales en los que cohabitamos los seres humanos. Esta idea puede ser una de las principales conclusiones que extraemos de estos primeros 6 meses de trabajo. 

Pero, además, también nos gustaría apuntar algunas cuestiones que hemos identificado en este incipiente proceso, sobre todo, aquellas que nos unen, de manera que poniéndolas en valor nos ayuden a avanzar en ese objetivo final que todas compartimos: el anhelo por vivir en una sociedad que conviva en paz. 

PRINCIPIOS. La apuesta decidida por un futuro que respete todos los Derechos Humanos y aparte la violencia como método de resolución de los conflictos, sin excepciones (física, verbal y psicológica), con el objetivo de preservar la dignidad humana.

COMPLEJIDAD. El proceso de construcción de la convivencia democrática es dificultoso. Requiere de voluntad de búsqueda del bien común, de diálogo, de esfuerzo, paciencia, de un compromiso intergeneracional, de políticas públicas sostenibles, del reconocimiento de la diversidad cultural y de una sociedad activa que nutra y la haga sostenible en el tiempo. Asimismo, necesitamos ser creativas e innovadoras para generar nuevos marcos y enfoques de debate, utilizando nuevos conceptos que generen consensos y permitan avanzar hacia nuevos horizontes.

DIVERSIDAD. Constatamos la diversidad de sujetos y agendas que integran dinámicas y propuestas encaminadas a fortalecer la cohesión social o que tienen como fin la consolidación de la convivencia. El reconocimiento y puesta en valor de esa diversidad es un síntoma positivo de una democracia. 

PARTICIPACIÓN. Existe una gran conciencia social y convicción política para impulsar, construir y participar en iniciativas políticas, sociales, económicas y culturales que tratan de generar nuevas alternativas de vida. La sociedad civil ha sido protagónica de muchos cambios sociales, desde enfoques de defensa de la justicia social, del feminismo, de la diversidad sexual, de la integración cultural, del ecologismo y la no-violencia, entre otras.

DIÁLOGO. Hay apertura para el diálogo sincero, creando espacios en los que, desde la confianza, todas nos sintamos cómodas, escuchándonos sin juzgar lo que estamos escuchando, porque para un verdadero diálogo es imprescindible superar los prejuicios. Pero, aunque existe la voluntad para el diálogo, no podemos olvidar que hoy en día no todas las personas pueden hablar libremente sobre lo acontecido en este país.

COEXISTENCIA. Existe acuerdo general en que en una sociedad diversa como la nuestra coexistirán relatos diferentes leídos desde múltiples sensibilidades. En la práctica esto supone poder contar lo que ha pasado de formas diferentes, pero estando de acuerdo en unos principios básicos, como el rechazo a todas las formas de violencias o la defensa de los Derechos Humanos.

DISPONIBILIDAD AL CAMBIO. Durante estos seis meses hemos identificado que hay disponibilidad al cambio, una predisposición a dejarnos trasformar por el diálogo para modificar nuestra forma de ser y superar las lógicas y los discursos que han caracterizado el largo ciclo de violencias. 

En definitiva, somos conscientes de que la ausencia de violencias no es la garantía para una paz justa y duradera. El Foro Social Permanente continúa trabajando para resolver de manera integral la situación de las personas presas, huidas y deportadas; por el reconocimiento y reparación de todas las víctimas superando las aún existentes discriminaciones; y por la construcción de una memoria crítica inclusiva. Pero también creemos que la construcción de la convivencia democrática nos interpela a todas, y que eso depende de grandes dosis de corresponsabilidad (institucional, social, económica) y solidaridad. Seguimos apostando por convencer y comprender, en vez de vencer y, es por ello, que estamos abiertas a ser convencidas. Eso es precisamente el diálogo.

En ese sentido, desde la responsabilidad individual y colectiva, desde la generación de alianzas y la convergencia de agendas y sujetos diversos, consolidando los espacios de micro-acuerdos multilaterales, conseguiremos que la paz y la convivencia democrática sean irreversibles. Y para ello, debemos seguir facilitando procesos para favorecer la adhesión social a este compromiso, tal y como explicará a continuación Eneko Calle. 

Pero antes, queríamos recordar que en octubre se cumplirán 10 años de la Conferencia Internacional de Aiete. Desde el 2011, diferentes sectores de la sociedad hemos trabajado para consolidar un proceso de construcción de paz. Son muchas las personas que dedicaron su tiempo, esfuerzo, imaginación y creatividad para que hoy estemos mucho mejor que hace 10 años. Una de esas personas fue Mixel Berhokoirigoin, un verdadero artesano por la Paz. Por eso, desde el Foro Social Permanente queremos dedicarle este pequeño homenaje. Eskerrik asko. 

 

TERCERA PARTE (ENEKO CALLE)

Eskerrik asko Mikel eta Aitzpea. Baita Mixeli ere eskerrak.

Estamos satisfechos de esta primera fase de seis meses. Ha sido rica e intensa. El proceso ha sido muy bien acogido. Las aportaciones son plurales y diversas.

Sin embargo, como dijimos en rueda de prensa en febrero, debemos seguir adecuando el proceso a la situación que estamos viviendo.

Esta mañana, en el encuentro previo realizado por el Foro Social en esta misma sala, hemos visto necesario dar continuidad a este proceso. El objetivo es seguir enriqueciéndolo con más aportaciones y facilitar la participación de la diversidad de agentes sociales que se han comprometido a compartir sus reflexiones y aportaciones a la construcción de la convivencia democrática. 

En ese sentido, desde el Foro Social Permanente, proponemos:

  • Ampliar hasta el 15 de julio el plazo para recibir aportaciones. 

  • Hasta esa fecha seguiremos organizando espacios públicos y privados para seguir recogiendo reflexiones y alimentando el proceso del compromiso social.

  • Y a partir de septiembre iniciaremos una ronda de contraste en torno al documento final de bases que presentaremos a finales de octubre. 

Como decía el pacifista Mahatma Gandhi, “nuestra recompensa se encuentra en el esfuerzo y no en el resultado. Un esfuerzo total es una victoria completa”. Estamos convencidas de que el esfuerzo está mereciendo la pena, de que las semillas para construir una sociedad mejor ya están plantadas y que pronto veremos florecer sus frutos. 

Eskerrik asko!